Luego de la polémica que se generó en el barrio porteño de Villa Urquiza, el bloque del Frente de Todos presentó un proyecto en el que declaran su “repudio y preocupación” por lo sucedido, respecto al déficit de espacios verdes con el que cuenta el distrito.
La Ciudad Autónoma de Buenos Aires posee cada vez menos espacios verdes y la última idea del gobierno de Horacio Rodríguez Larreta fue colocar árboles de metal en la Plaza Echeverría del barrio porteño de Vila Urquiza. La imagen de los árboles se viralizó y fue mayoritariamente rechazada. Actualmente, los legisladores del Frente de Todos (FdT) presentaron un proyecto en la Legislatura de la Ciudad en el que manifestaron su “repudio y preocupación” por la colocación de esas decoraciones.
Un vecino comentó en su Twitter: «En la plaza Echeverría tenemos árboles de metal y el pasto enjaulado. Y cemento, mucho cemento». Bajo el mismo eje, los diputados de la Ciudad solicitaron explicaciones al respecto de las razones que incidieron en la iniciativa entendiendo que en la Ciudad existe un déficit de espacios verdes, por lo que se habría desaprovechado la oportunidad de colocar árboles verdaderos y colaborar así con el cuidado del medio ambiente.
La iniciativa fue impulsada por la legisladora Laura Velasco, luego de que vecinas y vecinos del barrio denunciaran la aparecieron de unas estructuras de tamaño mediano, de metal y plástico, que simulaban ser árboles reales.
La legisladora Velasco solicitó información a la gestión de Rodríguez Larreta sobre diferentes aspectosrelacionados s a la iniciativa, entre ellos, el objetivo de la colocación de «los árboles de metal» en la plaza de Villa Urquiza y “el presupuesto destinado”.
A la vez, indagó “si se planifica colocar estas estructuras en otros parques o plazas” y solicitó, en el caso la respuesta sea afirmativa, “se detalle dónde serán colocados y el presupuesto asignado para la realización y colocación de los mismos”.
De ésta forma la legisladora , Velasco expresó que “la prioridad de la política pública debe estar puesta en la conservación y cuidado de los ejemplares arbóreos de la ciudad y no en su reemplazo por ´ejemplares´ de metal”.
Por otro lado, la aparición de los árboles de metal en tanto fue rechazada ampliamente, también por organizaciones ambientalistas que la calificaron de “aberración”. “Los niños ya no tienen dónde tocar un tronco, dónde jugar con hojas y palitos. Sólo plástico y metal verdes. Y talan todos los árboles cercanos a los juegos”, manifestaron desde la asociación Basta de Mutilar nuestros Árboles.