Los vecinos y vecinas del barrio porteño de Parque Patricios realizarán un semaforazo contra la construcción de un memorial en homenaje a las víctimas del Covid-19 en el Parque Florentino Ameghino.
Vecinos y vecinas de Parque Patricios realizarán un semaforazo hoy a las 18 horas en la intersección de la avenida Caseros y La Rioja, del Parque Florentino Ameghino, tras rechazar el proyecto propuesto por el Gobierno de la Ciudad para la construcción de un memorial en homenaje a las víctimas de la pandemia de Covid-19.
«El proyecto implica modificar el trazado del parque. Se quitará un sector juegos y se modificarán los caminos afectando la circulación de la gente. Un homenaje a las víctimas de Covid-19 debe contemplar la calidad de vida y no ir en detrimento de ella. Necesitamos más verde, no más cemento», comentaron en un comunicado los vecinos y vecinas del barrio porteño de Parque Patricios.
En tanto, el rechazo vecinal refiere al proyecto del Gobierno porteño para emplazar un monumento en el predio delimitado por las calles Monasterio, Santa Cruz, Caseros y Uspallata; con un costo de $26 millones y cuyo diseño fue el resultado de un concurso nacional a cargo de la Sociedad Central de Arquitectos.
Asimismo, el proyecto se extenderá a lo largo de 7.000 metros cuadrados de superficie, e incluye más de 4.000 metros cuadrados de pérdida de pasto y tierra, la tala de gran cantidad de árboles, y una gran fosa de dos metros y medio de profundidad.
En tanto, el rechazo de los vecinos del barrio se debe a que el proyecto, según denunciaron, surge de un concurso realizado «a espaldas de los vecinos» aprobado en la Legislatura porteña en primera lectura. El proyecto cuenta ya con una primera sanción de los legisladores porteños; no obstante requiere de una segunda aprobación dado que se encuadra en las leyes denominadas «de doble lectura», las cuales a la vez, demandan la realización de una audiencia pública para obtener la opinión de la ciudadanía al respecto.
«El parque tiene un gran patrimonio histórico y arqueológico» ya que «constituyó el cementerio de la epidemia de fiebre amarilla en el siglo XIX donde se enterraron 18.600 fallecidos y no se realizaron los estudios de impacto arqueológico -obligados por ley-, que demuestren que en el área a intervenir no hay cuerpos enterrados», indicaron.
Y además comentaron que el parque cuenta con una arboleda añosa, siendo «un gran pulmón verde para la comunidad», y la construcción del memorial alteraría un 20% del parque. «El proyecto implica modificar de forma fundamental el trazado del parque. Se quitará un sector central de juegos que es usado asiduamente por niños, y se modificarán los caminos afectando la circulación de la gente», expresaron.
«Un homenaje a las víctimas de Covid-19 debe contemplar la calidad de vida y no ir en detrimento de ella. Necesitamos más verde, no más cemento. Nuestra comunidad exige ser consultada e informada antes de imponer una modificación de tal impacto ambiental y vital», finalizaron.