El inicio del mes de diciembre da comienzo a la floración de una de las más importantes especies del arbolado de la Ciudad de Buenos Aires; millones de flores se desprenden de las copas de sus casi 15 mil ejemplares formando caminos que forman postales para la despedida de la primavera
En una postal paisajística de colores junto a los tonos rojizos y violáceos que van quedando atrás de ceibos y jacarandás, la Ciudad de Buenos Aires adiciona por estas fechas el amarillo intenso de la Tipuana tipu o simplemente conocida como tipa. La especie de singular porte y belleza es la vedette en los primeros días de diciembre, cuando sus 15.000 ejemplares florecen en diferentes puntos de la Ciudad.
“La tipa destaca entre las especies que ya forman parte de la identidad de la ciudad y que incluimos año tras año en el plan de forestación”, comenta Julia Domeniconi, secretaria de Atención Ciudadana y Gestión comunal. “Esta variedad estuvo presente este año en la plantación de los 15.480 nuevos árboles que sumamos a veredas y espacios verdes dentro del Plan de Arbolado”, indica la funcionaria.
Una visita por algunos de los principales corredores de tipas del entramado de la Ciudad invita a disfrutar estos días de un evento natural único. Durante el período de floración, se estima que al menos unas mil flores se desprenden de las ramas de cada uno de estos increíbles árboles en una cortina de lluvia que da forma a amplios mantos y senderos florales en calles, veredas, plazas y parques. Una aproximación indica unos 15 millones el conjunto de flores que descienden desde las copas hasta la base de estos ejemplares en los albores a los meses de verano.
Asimismo, la tipuana tipu constituye la séptima especie más frecuente del arbolado de la Ciudad y es la de mayor tamaño en las alineaciones viarias. A la vez, de sus 14.847 ejemplares, 9.330 adornan veredas y 5.517 se sitúan en espacios verdes.
En tanto, el ingeniero agrónomo Jorge Fiorentino, gerente de Arbolado de la Ciudad, comenta que este año se incorporaron más de una treintena de semi ejemplares de tipa en la Avenida Directorio, importante arteria vial del sur de la Ciudad. Y advierte: “Plantar árboles es una acción solidaria para las generaciones futuras, así como nosotros disfrutamos hoy de lo que plantaron nuestros abuelos”.
Asimismo, junto a los beneficios medioambientales y el valor estético de estos árboles, la Dirección General de Espacios Verdes y Arbolado destaca su funcionalidad como proveedores de sombra en concurridos sitios de la Ciudad de Buenos Aires. En su espacio natural, las tipas pueden superar los 40 metros de altura y su copa puede exceder los 20 metros de diámetro. En Buenos Aires, superan un porte promedio de entre 15 y 17 metros de alto.
Al mismo tiempo al igual que la mayoría de los principales árboles que recorren los diferentes barrios de la Ciudad, la tipa no es una especie originaria de Buenos Aires. En tanto, el paisajista Carlos Thays introdujo esta variedad procedente del norte del país en sus intervenciones sobre la estructura verde de nuestra Ciudad.
Dónde se encuentran los principales corredores de tipas
Vecinos y visitantes pueden disfrutar del atractivo de estos árboles en zonas de las 15 comunas, aunque determinados corredores o concentraciones de tipas convierten a algunos parques y avenidas en principales centros de atracción. Así se los puede encontrar en:
Avenida Valentín Alsina: junto al Lago de Regatas, en el Parque Tres de Febrero, en la comuna 14; presenta la más destacada alineación de tipas de la ciudad por el tamaño y altura de los ejemplares.
Avenida Pedro Goyena y Avenida La Plata: hasta Alberdi, en el barrio de Caballito, en la Comuna 6; allí se encuentra el corredor verde más extenso de la ciudad, con 350 tipas que en algunos tramos alcanzan los 24 metros de altura.
Avenida Melián: desde La Pampa hasta Olazábal, este corredor de la Comuna 13 es uno de los túneles verdes más queridos por los porteños. A lo largo de unas cinco cuadras se aprecia un despliegue de unos 130 ejemplares de tipa que casi triplican en altura a las casonas de inspiración inglesa del barrio de Belgrano R.
Avenida Figueroa Alcorta: junto a la Plaza República del Ecuador.
**Avenida Costanera Rafael Obligado*: en el entorno del Aeroparque Jorge Newbery se pueden observar imponentes alineaciones de tipas.
Costanera Sur
Cualidades de la especie y el mito del árbol que “llora” La tipuana tipu pertenece a la familia de las Fabaceae, una variedad originaria del sur de Bolivia, Brasil, norte de Paraguay y Argentina. En nuestro país se encuentra en las provincias de Salta, Jujuy, Tucumán y Catamarca. Es natural de la región tucumano boliviana y habita en los niveles inferiores de la selva y en la zona de transición en el parque Chaqueño Serrano.
Esta especie de gran porte llega a alcanzar los 40 metros de alto y un diámetro de hasta 1,50, de fuste mediano y generalmente recto. En ano, su gruesa corteza de color pardo grisáceo presenta resquebrajaduras longitudinales paralelas divididas en placas persistentes de dos a tres centímetros de ancho.
Asimismo, la tipa maravilla por su arquitectura. Sus numerosas ramas, gruesas y ondulantes, forman una copa densa y redondeada. De ellas mismas se desprenden otras de diámetro menor que a su vez lo hacen en ramas más pequeñas, colgantes o pendulares. A la vez, posee hojas semipersistentes tardíamente caducas y flores hermafroditas de color amarillo dorado con estrías moradas, rojizas o anaranjadas que crecen en racimos.
Esta especie florece de octubre a diciembre, manteniendo los frutos hasta mediados de julio. Su proceso de floración dura unas tres semanas, a lo largo de las cuales se produce una incesante “lluvia de flores”, dando lugar bajo su copa a la creación de atractivos mantos florales.
En tanto, el fenómeno anual por el que se conoce a la tipa como el árbol que “llora” es el producto de la presencia en sus copas de una chinche conocida como la Chicharrita de la Espuma. A la vez, este insecto vive en el follaje, succiona la savia y en su excreción forma una suerte de espuma que, al alcanzar determinado peso, colapsa como una gota y cae. Tiene que ver con un líquido azucarado que no es tóxico ni dañino para las personas ni animales.
Asimismo, en coordinación con las comunas, la Dirección General de Espacios Verdes y Arbolado de la Secretaría de Atención Ciudadana y Gestión Comunal promueve políticas públicas para contribuir a mantener un arbolado público sano, seguro y sustentable, así como para promover la calidad ambiental y el embellecimiento del paisaje de la Ciudad.
Debido al plan de forestación, la ciudad sumó este año 15.480 nuevos árboles a los más de 430 mil existentes en los espacios verdes y veredas porteñas. Por otro lado, las especies predominantes son el fresno rojo americano, el plátano, el jacarandá, el tilo, el paraíso y la tipa.
Por otra parte, la planificación anual define variedades cuyas características garantizan una mayor adaptación al medio urbano y brindan beneficios medioambientales persistentes como la reducción de las altas temperaturas, la absorción de dióxido de carbono y la disminución de la polución.
Distinguida con el reconocimiento Tree Cities of the World otorgado por Arbor Day Foundation y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, la Ciudad de Buenos Aires pone a disposición de los ciudadanos toda la información sobre el arbolado urbano mediante el portal Arbopedia, donde se puede conocer más sobre las características del bosque urbano y el cuidado de nuestras especies.