Esta área frente al río atraviesa desde hace años un proceso de reforma para generar más espacios públicos. Asimismo, en la pandemia, representó un rol esencial
Asimismo, a pocos días de las PASO, Juntos por el Cambio se vio forzado a modificar la sede donde iban a esperar los resultados los candidatos a jefe de gobierno y los precandidatos presidenciales. En tanto, la polémica se posicionó en la campaña por el Centro de Convenciones de Costa Salguero, el primer espacio elegido para instalar el búnker, como sucedió en muchas contiendas electorales anteriores. Aunque se vieron obligados a cambiar el rumbo para evitar desprolijidades y sospechas con una explotación que atraviesa su última etapa con cuestionamientos y concesiones contractuales controversiales.
En tanto, Costa Salguero y Punta Carrasco padecen desde hace algunos años un proceso de transformación para generar más espacios públicos en los sectores administrados por firmas privadas. Al mismo tiempo, a medida que se fueron venciendo los contratos, la Ciudad de Buenos Aires recuperó superficie que se transformó, en el Parque del Golf, donde funcionaba el histórico driving. A la vez, una concesionaria de vehículos, canchas de fútbol, gimnasios y locales comerciales fueron abandonando el predio a medida que culminaban los vínculos contractuales.
Sin embargo, ¿qué sucederá con el Centro de Convenciones y hasta cuándo podría continuar en funcionamiento. En tanto, la polémica por el búnker oficialista que estalló por el alquiler del espacio mediante el Instituto de Gestión Electoral (IGE) para el funcionamiento del centro de cómputo y monitoreo de las elecciones primarias, abrió el cuestionamiento y puso nuevamente en la mira el monto del contrato de concesión, uno de los interrogantes de los sectores que se oponen a los planes del oficialismo en esa porción del distrito porteño.
Asimismo, la Administración General de Puertos se concesionó, en 1991, el uso y explotación de Costa Salguero a la firma Telemetrix SA hasta el día 30 de abril de 2021; y en 2001, a través de la Ley N° 25.436, el Estado Nacional transfirió a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires la parcela de terreno por lo que se estableció que continuarían vigentes las cláusulas, plazos y otras condiciones establecidas en el contrato.
Por otra parte, el último canon mensual fue de $1.074.865, con un contrato que se prorrogó en al menos tres oportunidades y con vigencia actual hasta el 31 de diciembre próximo.
“Durante los años 2020 y 2021 numerosos espacios del predio fueron utilizados por parte del Gobierno de la ciudad, en colaboración con el concesionario y de forma gratuita, como centro coordinación logística y operativa de acciones destinadas a combatir la pandemia del Covid-19, primero como centro de aislamiento, luego de testeo y, finalmente, de vacunación”, comunican desde el Ministerio de Desarrollo Económico.
“Teniendo en cuenta el uso que hizo Gobierno del inmueble durante los últimos años de vigencia de la concesión, y a la espera del dictado de sentencia definitiva a efectos de poder de tomar una definición de mediano y largo plazo para el inmueble, se han prorrogado la concesión respecto de ciertos espacios. Tal prórroga fue encuadrada en el marco de las facultades de emergencia de las leyes 6.301, 6.384 y 6.507, que incluían la facultad de suspender, resolver, revocar, rescindir o modificar las condiciones esenciales de las contrataciones en cuestión y en virtud de razones de oportunidad, mérito o conveniencia, siempre que ello resulte financiera o económicamente más conveniente para el interés público, y así fue considerado”, fundamentan acerca de los motivos de la última prórroga.
Por otro lado, el canon mensual puede estimarse bajo si se tiene en cuenta sólo el monto del contrato que se abonó por el alquiler del centro de cómputos, próximo a los 130 millones de pesos .En tanto, a estos ingresos debe agregarse los generados por otras actividades que se realizan en el Centro de Convenciones. Asimismo, la situación, aunque en rubros distintos, es comparable a lo que sucedía con las grúas de acarreo antes que el servicio fuera estatizado, con dos empresas que se repartían las ganancias a cambio de un canon irreal.
Ante esta situación, el Gobierno de la Ciudad adoptó medidas. “Siendo que el plazo de la concesión fue extendido sólo respecto de ciertos espacios, el canon fue adecuado proporcionalmente en consecuencia. Ello sin perjuicio de la actualización periódica del mismo, que se hace en función de las pautas establecidas a tal efecto en el contrato de concesión”. No obstante, el nuevo canon continúa siendo negociado por las partes y se desea llegar a un acuerdo antes de que termine el contrato, con una retroactividad al vencimiento de contrato en 2021.
Por otra parte, con las condiciones actuales, en poco más de cuatro meses se pondrá fin a una cuestión de más de tres décadas de eventos, congresos, actividades políticas y fiestas electrónicas, como la penosa Time Warp donde fallecieron cinco personas de entre 20 y 30 años, en el mes de abril de 2016. En tanto, los galpones a la vez sirvieron para contener la demanda sanitaria durante la pandemia de coronavirus como centros de testeos y de vacunación. AL mismo tiempo, a finales de año le darán paso a otros usos como parte de la transformación que impulsa el distrito.
Por otra parte, la recuperación de la costa rioplatense, entre el norte y el sur de la Ciudad, avanza y va agregando transformaciones. El último tuvo que ver con la inauguración instalada sobre los escombros del edificio que padeció el atentado en 1994. En tanto, en Costa Salguero y Punta Carrasco los privados van abandonando los predios y el espacio público gana terreno, como sucede en el Parque del Golf.
Paralelamente, el plan abarca una mixtura de usos con edificaciones de viviendas, oficinas y comercios que se agregan al espacio verde, las propuestas gastronómicas y de esparcimiento que se irán instalando cuando se prodúzcala la última modificación. En tanto, en ese camino, la Justicia le puso objeciones al proceso que culminó con la aprobación de las leyes para comercializar las tierras y existió una audiencia pública con participación récord desde que se instrumentó la participación ciudadana como herramienta democrática. Desde ese lugar varios sectores de la oposición y la sociedad aclararon que no se encontraban de acuerdo con lo que estimaron una nueva privatización de espacio, aunque con otra denominación.