La comunera de la Junta Comunal 3 Inés Fornassero confeccionó un informe de accesibilidad sobre las estaciones de subte ubicadas en los barrios de Balvanera y San Cristóbal.
Asimismo, la comunera por Unión por la Patria en la Comuna 3, Inés Fornassero, elaboró un informe de accesibilidad sobre las estaciones de subte ubicadas en los barrios porteños de Balvanera y San Cristóbal. En tanto, esta acción se hizo en la previa de la Audiencia Pública que se realizará mañana viernes a las 15 horas para elevar el boleto del subte. A la vez, el Gobierno de la Ciudad propone pasar de los actuales $125 a $574 en abril (360% de aumento), $667 en mayo (433%) y $757 en junio (505%).
“De cara a la audiencia del viernes para aumentar el valor del boleto un 360%, creo que aporta un contexto interesante del déficit de acceso que tenemos”, dijo Fornassero.
“La Comuna 3, integrada por los barrios de Balvanera y San Cristóbal de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, cuenta con 20 estaciones de subte, por lo que se trata de la segunda comuna con mayor disponibilidad de este medio de transporte. Sin embargo, su acceso está restringido a parte de la población, ya que la mayoría de las estaciones no ofrece aún vías de acceso para personas con discapacidad, personas que cuidan infancias (principalmente mujeres), personas mayores, o con movilidad reducida de forma temporaria”, advierte el informe presentado por la comunera de UxP.
“El presente informe se elaboró en base a un relevamiento de las líneas A, B, E y H (la línea D no pudo relevarse por encontrarse fuera de servicio) realizado entre enero y febrero de 2024”, continúa el documento. En tanto, de un total de 18 estaciones relevadas, 11 (61%) estaban “sin accesibilidad por falta de obras” y había 15 (83%) estaciones sin accesibilidad (incluye accesos fuera de servicio).
Por otra parte, a la hora de analizar línea por línea, todas las estaciones de la Línea A “tienen problemas”: “Congreso: al momento del relevamiento (9/2/24) el ascensor de ingreso al andén sentido a Plaza de Mayo se encontraba fuera de servicio y aún continúa sin funcionar. No cuenta con escaleras mecánicas para ingresar a la estación. Pasco y Alberti: no cuentan con ascensores, escaleras mecánicas o rampas. Plaza Miserere: no cuenta con ascensores. Sí con plataformas para descender al andén (sentido a San Pedrito), pero no hay modo de llegar hasta allí. Dificultades para combinar con Tren Sarmiento y Línea H. Loria: no cuenta con ascensor en andén sentido a San Pedrito”.
En tanto, todas las estaciones de la Línea B cuentan con problemas: “Callao: al momento del relevamiento (27/2/24) el ascensor a andén sentido Alem se encuentra fuera de servicio. La escalera mecánica hacia la calle también. Pasteur y Pueyrredón: no cuentan con ascensores ni escaleras mecánicas para ingresar a boletería. Carlos Gardel: no cuenta con ascensores ni escaleras mecánicas para ingresar a boletería. La única vía con accesibilidad es ingresar recorriendo el centro comercial Abasto”.
Asimismo, todas las estaciones tenían problemas en la Línea E: las estaciones Entre Ríos – Rodolfo Walsh, Pichincha, Jujuy y Gral. Urquiza no cuentan con ascensores, rampas ni escaleras mecánicas para ingresar o salir.
A la vez, la Línea H: “Infraestructura con déficit parcial de mantenimiento”. Asimismo, las estaciones Córdoba, Corrientes, Humberto 1° y Venezuela cuentan con ascensores instalados para ingresar a hall y andenes. No obstante, al momento del relevamiento (19/2/24) las estaciones Corrientes y Venezuela se encontraban con ascensores hacia la calle fuera de servicio. Once – 30 de Diciembre: cuenta con ascensores instalados para ingresar a hall y andenes. Se da la particularidad de una plataforma para sillas de ruedas en conexión con Línea A pero sin cadena de accesibilidad.
De esa forma, una vez relevadas las estaciones, el informe de la comunera advierte que “El presente informe evidencia un profundo déficit de accesibilidad en las estaciones de subte de la Comuna 3, vinculado tanto a la falta de obras como de mantenimiento de la infraestructura existente. Esta situación afecta la experiencia urbana de miles de personas con discapacidad, personas que cuidan infancias, personas mayores, o con movilidad reducida de forma temporaria. Un conjunto de barreras físicas impactan en la vida cotidiana de estos vecinos y vecinas, impidiendo su acceso a la vía de transporte más ágil que ofrece actualmente la Ciudad, y una de las que menor impacto climático produce. Se requiere de forma urgente un plan de obras que implemente los 19 ascensores que faltan, así como un plan más eficaz para garantizar el correcto funcionamiento de los servicios disponibles. El derecho al transporte es el mismo para todos y todas, tal como establece la Constitución de la Ciudad”.