Preparan para el 7 de agosto protestas contra los despidos, tanto las Organizaciones sociales de la UTEP, la CGT, las dos CTA como organismos de DDHH, en el primer San Cayetano del gobierno de Milei a través de una masiva manifestación en Plaza de Mayo.
Asimismo, las organizaciones sociales peronistas nucleadas en la UTEP, acompañadas por la CGT, las dos CTA, organizaciones sociales y organismos de derechos humanos preparan para la jornada del 7 de agosto una contundente protesta en la Plaza de Mayo, en reclamo por los despidos y el ajuste en los salarios, en lo que será la primera celebración de San Cayetano del gobierno de Javier Milei.
Por otro lado, el gremio de la economía popular que integran el Movimiento Evita, el MTE, Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa, entre otras banderas, termina por estas horas de definir el plan de acción, pero ya está confirmado que la concentración principal será frente a la Casa Rosada, en la histórica Plaza de Mayo.
Sin embargo, más temprano se hará una bendición a herramientas de la economía popular en el santuario de Liniers, como ya es tradición, pero se organizará una peregrinación a través la avenida Rivadavia hacia el microcentro de la Ciudad.
A la vez, las razones tienen que ver con la idea de evitar confrontar con el protocolo antipiquetes de Patricia Bullrich, ya que durante las últimas manifestaciones, como la que se realizó para la votación de la Ley Bases, consideran que hubo provocaciones e infiltrados y temen que se repita esa conducta que justifique para el Gobierno una feroz represión.
Por otro lado, ese 12 de junio, a los incidentes, se agregó la sospecha de infiltrados y la cacería policial que terminó con más de 30 detenidos, muchos de los cuales eran manifestantes que ya estaban desconcentrados de manera pacífica a la altura de la avenida 9 de Julio, e incluso vendedores y personas que caminan por los alrededores. Asimismo, de hecho, sigue vigente el reclamo por la liberación de las únicas dos personas que permanecen encarceladas –Daniela Calarco Arredondo y Roberto de la Cruz Gómez–, cuyo procesamiento con prisión preventiva fue confirmado por la Sala 2 de la Cámara de Apelaciones, por incendio y daño agravado, y por atentado a la autoridad agravado y daño agravado, respectivamente. Pero no están acusados de intimidación pública o de haber cometido delitos contra el orden constitucional, como denunció en un primer momento Bullrich.
Al mismo tiempo, la UTEP definió en las últimas horas en diversas reuniones cómo será la manifestación del 7 de agosto, incluidas conversaciones la Iglesia. En el día de ayer, la CGT decidió plegarse a la protesta en el encuentro con el que también determinó que no participará del diálogo que propone el Gobierno.
“La idea es hacer una bendición de herramientas en San Cayetano y luego habrá una procesión simbólica hacia Plaza de Mayo, donde sí habrá una gran concentración bajo la consigna Pan, Paz, Tierra, Techo y Trabajo. No queremos un escenario donde se plantee una confrontación con el protocolo antipiquetes de Bullrich”, comentó Nicolás Caropresi, referente del MTE, una de las principales organizaciones de la UTEP.
“El 7 de agosto, una fecha histórica y sentida para el pueblo humilde y trabajador, junto a diferentes sectores sociales, sindicales, culturales, DDHH, etc. vamos a hacer una gran jornada por PAN, PAZ,TIERRA, TECHO Y TRABAJO! UNIDAD, ORGANIZACIÓN, SOLIDARIDAD, FE Y LUCHA”, tuiteó ayer Alejandro Gramajo, secretario general de la UTEP y referente del Movimiento Evita.
En tanto, hace años el gremio de la economía popular lleva adelante una movilización cada 7 de agosto. Asimismo, la unión de organizaciones con figuras destacadas como Emilio Pérsico, Juan Grabois o Juan Carlos Alderete originalmente se conocía como “Los Cayetanos”, a partir de la multitudinaria procesión de 2016 contra las políticas de ajuste de Mauricio Macri.
Por otra parte, las estadísticas reflejan un claro deterioro de las condiciones de vida de la mayoría de los sectores, aunque principalmente de pobres y clase media. Por eso, la congregación de San Cayetano podría ser un termómetro. A la inflación que no descendió considerablemente desde diciembre se suma una caída importante de las fuentes de trabajo en el primer semestre del año.
De acuerdo a un informe publicado esta semana por el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), ya hubo unos 170 mil despidos entre noviembre de 2023 y abril de 2024, sumando el sector privado y los puestos recortados en el Estado por la motosierra de Milei.
A la vez en la Iglesia hay expectativa por el 7 de agosto, en el marco de una preocupación generalizada por la cuestión social. Asimismo, desde la Conferencia Episcopal Argentina, que preside monseñor Oscar Ojea, identificaron a San Cayetano como una de las celebraciones comunitarias “más importantes”, a la par de la peregrinación Luján.
Aparte es notorio que la relación entre el Gobierno y la Iglesia pasa por un periodo de fuerte enfriamiento, a tal punto que no hay relación de alto nivel entre la pastoral social y la Casa Rosada. En tanto, por caso, no hay vínculo con la ministra Sandra Pettovello, aunque sí con la secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia. Tampoco hay fluidez con la secretaría de Culto, Francisco Sánchez, que depende de la canciller Diana Mondino. La distancia quedó cristalizada en el Tedeum del 9 de julio, cuando el arzobispo de la Ciudad de Buenos Aires, monseñor Jorge García Cuerva, hizo una fuerte homilía crítica frente al propio mandatario.