La Red Interbarrial Buenos Aires se manifestó en distintas esquinas de la Ciudad reclamando la suspensión de los permisos de obras de diferentes pisos y del código urbanístico.
En tanto, la Red Interbarrial Buenos Aires, que nuclea a vecinos de los barrios porteños, hicieron un semaforazo el sábado pasado donde comunicaron que el actual Código Urbanístico «rompe la identidad de los barrios». Y al mismo tiempo solicitaron desde cuatro esquinas de la Ciudad, que se cambie la norma que habilita construcciones en altura en barrios de casas bajas.
Al mismo tiempo, los vecinos se reunieron en cruces de la Ciudad con pancartas y bombos para reclamar al Gobierno porteño la modificación de la norma que está afectando barrios como Villa Ortúzar, Chacarita, Colegiales y Parque Chas. «Pedimos la modificación del Código porque está perjudicando específicamente los barrios de casa bajas, están siendo destruidos por la sobreconstrucción», dijo Daniel Giglio, arquitecto e integrante del Colectivo Colegiales Participa y Decide, quien fue a reclamar al cruce de las avenidas Álvarez Thomas, Elcano y Forest junto a varios vecinos de Villa Ortúzar, Chacarita, Colegiales y Parque Chas.A la vez, adicionó: «Como no hay regulaciones, se están haciendo construcciones enormes en profundidad y altura, y eso rompe la identidad del barrio».
El «semaforazo simultáneo» se llevó a acabo en la intersección de las avenidas Cabildo y Crisólogo Larralde; donde se autoconvocaron vecinos de Saavedra, Coghlan, Villa Urquiza; y en Cuenca y Nogoyá con residentes de Villa del Parque, Villa Santa Rita y Flores, y por otro lado, en Córdoba y Scalabrini Ortiz para los residentes de Palermo y Villa Crespo.
En tanto, la demanda a la gestión de la Ciudad contempla la solicitud de «suspensión inmediata de los permisos de obra en el marco del Código Urbanístico actual y de las demoliciones de construcciones de valor patrimonial», afirmaron los organizadores. «Estas obras van a generar problemas con el estacionamiento, el agua y los desagües pluviales. No estamos en contra de las construcciones en las avenidas, pero no se pueden infiltrar en los barrios. Los barrios de casas bajas la gente los elige por la tranquilidad, no pueden imponer estos edificios», afirmaron.
Por otro lado, la Red Interbarrial llevó adelante, semanas atrás, una movilización a la Legislatura de la Ciudad para denunciar «las consecuencias negativas de la aplicación del nuevo Código Urbanístico en la Ciudad de Buenos Aires». Asimismo, la norma fue sancionada por la Legislatura en 2018 para extender los topes de altura de los futuros edificios en toda la Ciudad, sin diferencias de zonas, lo que originó la aparición de construcciones en altura en barrios que tenían casas bajas.
Actualmente a cinco años de la aprobación, son más de diez los proyectos presentados en la Legislatura porteña para modificar la versión del Código vigente; sin embargo, los expedientes no fueron tratados aún en el ámbito parlamentario. De acuerdo a la Red Interbarrial Buenos Aires, «el Código Ubanístico actual y sus excepciones están destruyendo la calidad de vida de vecinas y vecinos y la fisonomía de la Ciudad», dijeron en un comunicado.
«Fomenta el aumento exponencial del volumen constructivo, las alturas y el avance sobre los pulmones de manzana, las líneas de frente y de retiro; el estallido de la explotación comercial, la saturación de usos del suelo y de servicios; el avance sobre los espacios verdes y la pérdida del arbolado urbano, y la destrucción del patrimonio histórico y arquitectónico de los barrios».