La cifra de operaciones efectuadas en 2023 lo sitúan como el mejor año en referencia a los anteriores desde 2018.

En el conflictuado escenario del 2023, atravesado por vaivenes políticos y económicos, en el que las devaluaciones, las elecciones y la incertidumbre se entrelazaban constantemente, existió un protagonista inesperado que emergió con determinación: el sector inmobiliario. Asimismo, el mercado de compraventa de propiedades no solo sobrevivió, sino que se reactivó luego de la debacle que ocasionó la pandemia.

Este movimiento se reflejó en las cifras. A la vez, con 4560 escrituras, diciembre fue el mejor mes del año pasado con un monto total de transacciones de $233.571 millones, según el último informe del Colegio de Escribanos de la ciudad de Buenos Aires. Asimismo, comparando con el mes anterior, que registró 4068 escrituras, se ve un incremento del 12,1%. Por otro lado, el monto total de las transacciones experimentó un notable incremento del 76,9%, ya que en noviembre del año pasado se situaba en $132.080 millones.

Al mismo tiempo, las cifras actuales son alentadoras y reflejan una reactivación del sector. En tanto, si la comparación se centra en el último mes del año, en diciembre de 2018 se registraron 4656 escrituras, apenas por arriba de las 4560 del último mes del año pasado. No obstante, este número está un 42,2% por debajo del récord alcanzado en diciembre de 2017, con 7908 operaciones, uno de los mejores años para el sector en la última década.

A la vez, si se compara diciembre de 2023 con el mismo mes de 2022, la cantidad total de escrituras de compraventa de inmuebles registró un aumento del 7,2%.

Por otra parte el dato más revelador es que 2023 cerró como el mejor año desde 2018, período en el que la demanda aún se movía impulsada por el envión de los créditos UVA. Así, con un total de 40.539 escrituras, el año pasado experimentó un aumento del 20,1% en comparación con 2022, cuando se realizaron 33.753 transacciones. En cuanto al monto medio de los actos, el 2023 alcanzó los $51.221.816, con un crecimiento del 201% en comparación con 2022, cuyo monto medio fue de $16.970.504.

A la vez, las transacciones con crédito continúan siendo poco representativas. En tanto, con un total de 116 en diciembre de 2023, este número representa una baja del 18,3% respecto al mismo mes del año anterior, cuando se contabilizaron 142 escrituras con hipoteca.

No obstante, en el balance anual, 2023 superó a 2022 con un acumulado total de 1648 escrituras con hipotecas, un 14,37% más que las 1441 registradas en 2022. Por ello si la comparación es con 2018 los números sorprenden aún más: ese año en un mes se llegaron a cerrar 2500 operaciones con crédito. “Se cierra otro año con crecimiento, y los números expresan también claramente que estamos en un mercado sin crédito, porque de esas 40.500 operaciones totales de 2023, no hay más del 5% con hipotecas”, dice Jorge De Bártolo, presidente del Colegio de Escribanos de la ciudad de Buenos Aires.

Asimismo los registros actuales distan considerablemente de los destacados años de la última década, como el 2004 y el 2007, en los cuales se firmaron entre 73.000 y 75.000 escrituras anuales, estos números no hacen más que reforzar la percepción de que el mercado inmobiliario está experimentando un cambio de ciclo.

Por ello hay que recordar que en el 2023 se dieron más pruebas que afianzan la tendencia, como el interés de los players del sector en comprar tierra en el Parque de Innovación.

Situado en el barrio porteño de Núñez, donde funcionaba el Tiro Federal, este proyecto busca convertirse en un nuevo barrio de la ciudad, con una propuesta que incluye viviendas, espacios de trabajo, y una oferta educativa y tecnológica concentrada en un área reducida bajo el enfoque de la innovación. De acuerdo a los cálculos que hace el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, transitarán por el parque unas 29.000 personas por día con una actividad económica que rondará los US$1000 millones.

Hoy día ocupado por espacios públicos y algunos cimientos de edificios, el Parque se está urbanizando a un ritmo acelerado y se van conociendo los distintos emprendimientos que lo van a componer. Entre otras empresas que ya apostaron por el Parque se encuentra el Grupo Werthein que invertirá US$180 millones en tres torres premium de 100 metros de altura, el Fideicomiso Buenos Aires Landmark, y Sancor Seguros.

Por otra parte, la última parcela disponible la compró el Grupo Chomer por US$15 millones, quien se sumó a la movida junto con otros desarrolladores destacados. Asimismo, el año pasado, el proyecto experimentó un boom en las ventas, con el edificio E6 de Grupo Portland, uno de los primeros que comenzará a construirse con fecha de inicio de obra para marzo de 2024 y 150 departamentos vendidos en un mes y medio. La demanda se atribuye a la ubicación estratégica en el corredor norte de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Otro de los proyectos que prueban el dinamismo del sector es la torre Pininfarina que se construye en Puerto Madero en la que el Grupo Macro desembolsará US$30 millones. El director de la desarrolladora, Marcos Brito, uno de los seis hijos del fallecido banquero Jorge Brito, planea finalizar el proyecto en tres años y destaca que están preparados para enfrentar diferentes situaciones.

Asimismo, otro evento significativo para el mercado inmobiliario fue la compra de un terreno emblemático en la Avenida del Libertador en el barrio de Núñez, donde Raghsa, la principal desarrolladora de oficinas, planea construir una nueva torre corporativa de oficinas. Con esta apuesta, la empresa con más de US$300 millones de inversiones en la zona planea convertir esta área de la ciudad en un polo premium: el “nuevo Catalinas”. La adquisición del terreno fue celebrada por los desarrolladores inmobiliarios. “La magnitud de la inversión y la extensión del proyecto son notables, y compara esta transacción con casos históricos en los que grandes inversiones inmobiliarias se realizaron en momentos cruciales de la historia argentina”, dice Damián Tabakman.